jueves, 4 de junio de 2009

El plan de control demográfico

Multas caras para la elite china

Los ricos pagarán más que otros por tener más de un hijo

PEKIN (AP).- La celebridad siempre tiene sus privilegios, pero en China tener una familia numerosa no va a ser uno de ellos.

Las autoridades de planificación familiar chinas buscan subir las multas para los ricos y famosos que tengan más de un hijo, en un intento de detener las crecientes violaciones del control demográfico impuesto por el gobierno comunista.

Las multas por violar la ley de un hijo por pareja se calculan a partir del ingreso per cápita local y pueden llegar a unos 100.000 yuanes (unos 44.000 pesos). Ese es un monto suficiente para llevar a una familia común a la bancarrota, pero no para causar grandes inconvenientes financieros a los ricos y famosos, quienes muchas veces usan su influencia para no pagar las sanciones.

Según la agencia estatal china Xinhua, el gobierno ha decidido que las multas para los más ricos sean mucho más altas (no se sabe todavía cuánto) que las que pagan los demás ciudadanos. Ellos también serán penalizados con restricciones al crédito. Pero todavía no se tiene claro qué criterios van a separar a las "celebridades" de las personas comunes.

"Celebridades y millonarios no deberían tener ningún privilegio si conciben más hijos", dijo Zhang Weiqing, director de la comisión estatal de planificación familiar. Y agregó que, aunque considere pequeño el número de famosos que violan la regla de límite familiar, su postura tiene una "influencia social negativa".

El profesor de sociología Xia Xueluan, de la Universidad de Pekín, dijo al diario The Guardian que la restricción al crédito puede detener el incumplimiento de la ley, "principalmente entre los empresarios", pero que la propuesta del gobierno tendrá poco impacto en las áreas rurales de China, donde la tradición es más fuerte que la influencia de celebridades.

Para controlar el crecimiento en el país, de 1300 millones de habitantes, la ley china determina que las parejas que viven en ciudades sólo pueden tener un hijo; ese límite sube a dos en las zonas rurales.

Las restricciones, establecidas hace 30 años, supuestamente evitaron un incremento de 400 millones de personas en la población. Sin embargo, generaron complejos efectos colaterales, incluyendo un desequilibrio entre el número de mujeres y hombres (reflejo de la tradicional preferencia por tener varones) y una fuerza de trabajo cada vez menor en comparación con el creciente número de ancianos jubilados.


Más Información en:

http://www.publico.es/internacional/058030/china/mantendra/politica/hijo/unico

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